miércoles, 2 de enero de 2013

2013

No quisiera estar en tus zapatos,
con tanta belleza que te queda por superar.
Se fue el año místico y nos dejó su toque...
su claridad, la vocación, la fuerza y el faro.

Una enseñanza: no siempre podemos estar
en el lugar anhelado o, al menos, no siempre
es cuando nosotros lo creemos oportuno.

El paraíso postergado... respiro en el pulmón sureño
respiro y espero, aguardando la lluvia
y, al final de la travesía, encontrarte.

2 comentarios:

  1. María E.

    que bueno poder leerte de nuevo!
    veo que algunas campanas han sonado, aún en la extrañanza
    la canela en el café endulza y susurra que hay algo más allá...
    me gustó el poema, encierra el misterio del mensaje interior
    besos amiga!

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  2. Las campanas no han sonado tanto como hubiera querido, pero dieron un respiro grato...
    Es un gusto estar en contacto de nuevo! Un abrazo!

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